Cuando Víctor Manuelle se sentó a componer unas canciones para sus familiares, lo hizo sin pensar en hacer público algo que considera parte de su intimidad. Pero ese “capricho” poco a poco tomó forma hasta convertirse en el proyecto discográfico Muy personal.

En él, les canta a sus padres Jenny y Víctor, a su hermano Héctor Gustavo, y a sus hijos, Kinaysha, Yanishka y Víctor.

“Es un disco que le va a gustar mucho al público”, advierte. “Van a conocer un poco más al ser humano, y como siempre, Víctor Manuelle les canta a sentimientos, ya sea en amor, desamor, romanticismo, pues por primera vez penetran al corazón y pueden escuchar una historia genuina del verdadero amor que siento por mis familiares”.

“Esto lo complementamos con los éxitos que ya he tenido en baladas, como Maldita suerte, Nuestro amor se ha vuelto ayer, Tengo ganas, y en un momento dado, pasa a la parte muy personal y lo que tiene interesante es que vas a ir escuchando la producción y se interrumpe, y empiezo a hablar: 'Si llegaste a esta parte del disco, ahora vas a entender el título del disco', y voy explicando cómo nació cada canción”, detalla del disco que se presenta con el sencillo Amor de madre, dedicado a su progenitora.

“El amor más puro que puede existir en la tierra es el amor de tu mamá. Cómo una persona en un momento dado se puede abandonar por completo para dejar de ser de ella y ser para sus hijos, y como hijo, lo que estoy mirando es que ahora que ha pasado el tiempo y soy papá, puedo valorizar eso más”.

Grabar junto con su pianista y productor del álbum, Harry Aponte, fue quizás la etapa más sencilla en el proceso de hacer canciones los sentimientos que le despierta su núcleo más querido. “Cuando escribes del desamor, te puedes imaginar situaciones o le añades un poquito de lo que le pasó a tu amigo, o de lo que viste en una película romántica, pero aquí no hay fantasías”, sostiene la imagen masculina de Hugo Boss en Puerto Rico.

“La única (canción) que se me hizo súper, superdifícil, fue la de las nenas, que es que estoy viendo que están creciendo, que se están poniendo hermosas y que en un momento dado uno cierra los ojos y la grande, que ya tiene 13, quiere vestirse más linda... Esa canción me senté varias veces y me quedé trancado, y consulté con Noel Schajris, de Sin Banderas, que se ha convertido en un gran amigo, y con Claudia Brant, y me dijeron: 'Déjanos esa canción a nosotros'”, precisa de sobre cómo se gestó Un día se irá, dedicado a Kinaysha, de 13 años, y a Yanishka, de 10.